El rechazo a la inyección genotrónica ARNm logra aunar a los antivacunas y los provacunas en un frente popular internacional nuremberguiano

Los levantamientos populares en Paris y Turín, – que siguen a los de Londres, y a toda la pléyade de movilizaciones biodemocráticas en toda Europa y los EEUU -, tras las medidas de imposición del llamado ‘pase verde’ fundamentado en el “crédito social”, que ha sido construido primeramente sobre las coercitivas pruebas personales de sometimiento a la inyección del modificador genético que promueven los tecnomalthusianos – que no transhumanistas-, manifiestan el rechazo popular internacional al privilegio emergente que la fracción totalitaria de la burguesía internacional se intenta arrogar de libre experimentación no consensuada contra humanos sobre las poblaciones nacionales y fluyentes, componentes de la demografía del capital humano a inicios de la Fase de la Robotización de la acumulación de capital.

En este nuevo esquema de poder se pretende reducir al proletariado mundial, especialmente, a ser mero combustible a todo espectro de la acumulación de capital, con el total beneplácito de la socialdemocracia internacional y su neorreformismo de acompañamiento.

Al par que el movimiento popular internacional se levanta contra esta ofensiva tencomalthusiana internacional estamos asistiendo a una emocionante convergencia biodemocrática entre los pro vacunas y los antivacunas alrededor de tres ejes clave que los tecnomalthusianos han decidido sobrepasar, armados con sus funcionariados estatales cautivos y la red de poder transnacional tecnomalthusiano, que abarca la ONU y un complejo de fundaciones, oenegés, socialdemocracia internacional e izquierdas profesionales del espectáculo de clases medias (fracciones técnicas, – sobre todo Big Techs, digitales y de la energia verde -; funcionariados, – dependientes de la plusvalía tributaria y del negocio de vender esclavitudes colectivas con el método de la deuda pública asignada como servidumbre colectiva pero no consensuada colectivamente -; pequeñas burguesías nuevas, en especial digitales y biotecnológicas; y aristocracias obreras, especialmente las regeneracionistas de las generaciones post caída de la URSS que buscan su lugar de clase en la fase de la Robotización).

Los tecnomalthusianos disponen de la propiedad de estos funcionariados a través de los endeudamientos públicos; en último análisis, una forma de capitalización esclava colectiva expresada en valores negociables en los mercados internacionales, finalmente títulos de propiedad ilegítimos sobre cuerpos colectivos humanos. Toda la metodología de asignación de “deuda pública” tiene que ser puesta bajo escrutinio popular y espartaquista para que la esclavización de masas por parte de minorías funcionariales, aristócratas obreras, industriales y financieras, en esta convergencia de clase tecnomalthusiana, deje de hacer posesión y propiedad de cuerpos colectivos para sostener la reproducción histórica de su explotación.

Una protesta en Berlín contra jerarcas tecnomalthusianos agresores del Convenio de Nuremberg

Una convergencia popular histórica internacional anti darwinazi muy esperanzadora

Los históricos movimientos biodemocráticos populares y gran parte de la vanguardia científica internacional pro vacunas se están aunando y reconciliando alrededor de la necesidad del ineludible respeto de todos a tres ejes fundamentales anti darwinazis:

1/ El inexcusable respeto al Convenio de Nuremberg en el punto en que establece la prohibición de hacer experimentos médicos científicos con seres humanos sin informarles del carácter experimental y sus riesgos a la persona objeto de la acción, que por ello se convierte inmediatamente en una agresión delictiva que puede llegar a constituir incluso un crimen contra la humanidad;

2/ la denuncia de una conjura política ventajista oligárquica internacional y hasta global, en descomunal negocio político ilegitimo, alrededor de la ocultación al público de los efectos adversos de la inyección genotrónica

y 3/ la lucha por informar a la población de la existencia de las terapias accesibles y alternativas con gran ventaja respecto a la terapia génica experimental de los modificadores genotrónicos ahora en pruebas de masificación y en proceso de recolección de datos constituyentes del nuevo capital cognitivo.

Esta situación viene marcada porque la inyección genotrónica no es una vacuna, y muchos pro vacunas no quieren que se confunda la clásica tecnología de las vacunas con las robotizadoras tecnologías experimentales ARNm, y exigen que estas terapias, que no frenan la proliferación e incluso se teme que la relanzan, tengan como mínimo los mismos niveles de seguridad al menos que las vacunas verdaderas.

En estos momentos la contradicción entre los provacunas y los antivacunas es una contradicción secundaria ante la contradicción emergente entre los capitalistas globo-oligopolistas tecnomalthusianos y los populares internacionales nuremberguianos.

El rechazo de la inyección genotrónica ARNm ha logrado aunar a los históricos movimientos biodemocráticos populares antivacunas y a las vanguardias democráticas provacunas en un frente popular internacional nuremberguiano, con límites bioéticos populares inequívocamente anti darwinazis.

4 comentarios en «El rechazo a la inyección genotrónica ARNm logra aunar a los antivacunas y los provacunas en un frente popular internacional nuremberguiano»

  1. Near Arc de Triomphe, Paris NOW: Tear gas and watercannon used to disperse anti-Covid restrictions protesters/ París, ahora mismo, junto al Arco del Triunfo: utilización de gas lacrimógeno y de cañones de agua para dispersar a l@s manifestantes contra las restricciones impuestas a cuenta de la panestafa que llaman pandemia covid-19:

    https://t.me/rtintl/8798

    https://t.me/rtintl/8799

    Telegram (https://t.me/rtintl/8798)
    RT
    Near Arc de Triomphe, Paris NOW: Tear gas and watercannon used to disperse anti-Covid restrictions protesters.

    Responder

Deja un comentario