Principales denominaciones del Trabajo en Europa y sus etimologías:
LANA. Euskara. La hipótesis es que la raíz etimológica este formada a partir de la distinción LO EGIN, dormir, y sus derivados, LOrtu, conseguir, LOtu, atar, LOtsa, vergüenza, pundonor. A su vez, basada en la distinción entre GER y LAN, donde LAN tierra de dormir, y así LAN EGIN, en origen, hacer campamento. Con LANA estaríamos, pues, ante el concepto preclasista de Arbeit/Trabajo/Laburo/Work.
ARBEIT. Trabajo en alemán. Tiene los mismos radicales que Rabotnik, trabajo en ruso, y ROBOT, trabajo esclavo en checo, concepto empleado en gran número de lenguas actuales para designar máquinas relativamente autónomas, autómatas. Arbeit, es derivado de AR+OP+OT, donde ar, tierra, op, abrir, y ot corral. Luego refiere a trabajador, pero antes ‘campesino domesticado’, señalar que en euskara OTSEIN, se asimila a ROBOT, pero OTSEIN, criado, significa generado en corral. Por esto, ARBEIT, desde el análisis etimológico tiene todos los visos de significar trabajo o actividad obligatoria, de seres humanos esclavizados, no propietarios.
LAVORO. Italiano, inglés(Labour), castellano (labor). Se da como proviniente de una raíz “indoeuropea”(?), ¿acádica?, LEB. En cambio, lab+ore, al modo de LAB: LA es raíz etimológica de tierra y B puede ser sincopado de OP, abrir, con el significado de abrir la tierra, de donde tomaría el sentido de actividad pesada. En castellano da en LABRAR.
TRABAJO. De etimología bien conocida. Derivado de TRIPALIUM, en latorrománico, tres palos, en alusión al artefacto de castigo en que se ataba al esclavo que no cumplía con las exigencias de los propietarios o sus representantes. Este tripalium servía de amenaza a todos los productores en situación de esclavitud, en los latifundios (Propiedades latinas, que toma hoy el sentido de gran propiedad territorial). Tripalium dió en castellano Trabajo, en francés Travail, en catalán, TREBALL, portugués Trabalho.
WORK. Ingles. De la raíz URGERE, urgir. Contiene un sentido de urgencia, de premura, función que hay que hacer con intensidad, rápidez y bajo presión. Parece ser que empezó a emplearse hacia el siglo XVIII, siendo por tanto el sema más moderno del conjunto de estos etimos del trabajo.